martes, 10 de junio de 2008

El Percal

Boletín informativo desde la calle. Junio de 2008

Índice

- Apretarse el cinturón, rascarse el bolsillo y...
- Propuestas: ¿Cómo afrontar la crisis?
- ¿Quién paga el pato?
- ¿Para qué sirven las Viviendas de Protección Oficial?
- Churra: Escombros de lujo
- La Fábrica de hielo: Un ejemplo vivo de que Murcia no se vende (Anexo: Bienvenido al bando de la... muerte
- Señales de humo... Contra la alta velocidad
- Manual práctico de autodefensa proletaria


Apretarse el cinturón, rascarse el bolsillo y agachar la cabeza


Como apuntábamos en el último número (diciembre de 2007), se acercan momentos difíciles para llevar a cabo grandes inversiones, comprar acciones en Bolsa y especular con dinero negro para que se genere más beneficio (a cambio de casas vacías o financiando “obras sociales” de todo tipo) . Tiempos duros en los que habrá que deshacerse de algún lujoso coche.
No nos referimos aquí a comprar una casa modesta, algo que hace tiempo es complicado, sino a los juegos de mesa en los que se entretienen los gestores de la economía española para seguir compitiendo entre ellos y “equilibrar la riqueza del país”. A nosotros, como podemos comprobar con el despido masivo de trabajadores* y la subida de precios al consumo, nos toca pagar los despilfarros y las “inversiones arriesgadas fuera de tiempo” para que estos gestores recuperen aire, retomen posiciones y lleven adelante nuevos proyectos de expansión.
Vemos cómo, de la noche a la mañana, la estrategia de grandes empresas, punto de referencia para otras en busca de salidas rentables, cambia repentinamente de rumbo para demostrarnos que, en el fondo, son buena gente. Por ejemplo: Iberdrola nos ayuda a mantener el planeta limpio con sus ultramolinos, Repsol nos ayuda a no contaminar la atmósfera con sus eco carburantes, Acciona es sostenible mientras hormigona por tierra y mar, el Banco Santander ahorra por nosotros con sus planes de hipoteca... Es decir, intentan darle la vuelta a la tortilla. Mientras, nosotros, debemos hacer un esfuerzo para superar la “crisis” o la “recesión”, según quien opine.

¿Por qué? Las tornas cambian y si antes ciertas apuestas no eran seguras o llevaban a un callejón sin salida, ahora se convierten en un filón a largo plazo. Mercancía para algunos, necesidades básicas para otros, pero que en breve multiplicarán su valor:

Agua: En ciertas zonas escasea. Su uso cotidiano por parte de la población, para subsistir, es y será un gran negocio en el futuro. Las facturas abusivas que nos clavan las compañías cada dos o tres meses hablan por sí mismas.

Energía: Revender la energía renovable a trocitos (la solar y eólica principalmente) cuando el petróleo siga subiendo o escasee, dará billetes. Ya estamos viendo la construcción de numerosas “huertas solares” y molinos ultramodernos a lo largo del territorio.

Esta inversión no se hace por amor al planeta o a la humanidad, teniendo en cuenta que proviene de quienes arrasan con territorios naturales o esponsorizan el lavado de cara en ciertas ciudades expulsando a las clases bajas. El capital está moviendo ficha. La energía ni se crea, ni se destruye, se vende (que es más rentable).Es hora de enseñar la cara más amable del capitalismo actual. Apostar por ideas nuevas y “ecológicas”, recuperarlas, y renovar la imagen agresiva que se ha creado alrededor del, hasta ahora, sector mayoritario de la construcción. El gasto o las pérdidas que se prevén para cientos de empresas durante la etapa actual se compensa con cierres de filiales, abaratando costes, precarizando el empleo, recortando plantilla e invirtiendo en proyectos (las energías renovables, la vivienda pública...) que además tienen el apoyo de las instituciones y reciben subvención por potenciar ciertas iniciativas que nos salvarán de la crisis. También es el momento oportuno de destapar los diferentes mecanismos que instituciones, patronal y sindicatos llevarán a cabo para no recortar sus presupuestos (beneficios, ayudas, subvenciones...) a costa de recortar las condiciones de vida de la clase trabajadora. Es momento de movilizarse sin políticos en la calle, en el trabajo, en la universidad...
Organicemos nuestro cabreo

*“El sindicato UGT anunció ayer que la empresa de zumos Rostoy, de Casillas (Murcia,
despedirá a 40 obreros; la mitad de su plantilla actual.” Diario 20 Minutos, 3 de Abril de 2008

Propuestas: ¿Como afrontar la crisis?

Algunas líneas de intervención social ante la crisis económica como salvavidas del capital y sus gestores:


-Resistencia a las maniobras del capital (solidaridad activa entre despedidos y trabajadores ante recortes de plantilla, salariales, legales... repulsa social a la subida de precios a la población exigiendo el abaratamiento de estos...) y reducción del tiempo de trabajo (bajar el ritmo para retardar sus planes de “reactivación” de la economía)

- Contra las medidas de recuperación de la crisis: topes, congelación de salarios, expedientes de crisis, despido libre, regulaciones de empleo...

-Contra el paro: exigiendo un salario suficiente garantizado y organizando grupos de parados para destapar de forma colectiva las consecuencias “colaterales” de la crisis...

-Extender, profundizar y generalizar las luchas y las asambleas sin mediadores políticos ni sindicales: dentro y fuera de la empresa, por sectores, zonas geográficas, en la calle, por barrios... Evitar que los conflictos queden aislados (solo transportistas, solo inmigrantes...)

-Contra los desequilibrios y desigualdades regionales, o zonas concretas de la geografía, impuestas por el capitalismo y la sobreexplotación de las zonas subdesarrolladas...

Unión, acción y autogestión de nuestras vidas


¿Quién paga el pato?

El Grupo Levantina de Mármoles y el Grupo Soledad arrojan más de 200 personas al Valle de las Uvas (Alicante)


El E.R.E (Expediente de Regulación de Empleo) del Grupo Levantina de Mármoles (GLM), que amenaza con dejar en la calle a 195 trabajador@s, junto a la oleada de “despidos improcedentes” del Grupo Soledad (propietario entre otros de los talleres Confort Auto) sumarían la notable cifra de más de 200 parad@s en menos de tres meses entre distintas poblaciones de Alicante como Aspe, Novelda, Elda… la zona que se conoce como “Valle de las Uvas”.
El Grupo Soledad, en una hábil maniobra empresarial lleva dos meses despidiendo gente periódicamente (11 despidos una semana, tras dos semanas otros 20… y así). Esto limita las posibilidades de l@s trabajadores para organizarse y hacerles frente, y desune a los compañer@s que se encuentran con un clima de miedo y acoso que les hace proteger con más celo su puesto de trabajo de manera individual.
Esta operación se está realizando de forma tan oscura y soterrada que nos es imposible precisar hasta la fecha el número de trabajador@s despedidos.
Por otro lado, el grupo Levantina de Mármoles tiene previsto el cierre de dos plantas (Lam 12 y Lam 6) y el recorte de 40 puestos en una tercera, Spain Marmle. La calaña empresarial se excusa en el “retroceso de la construcción, las importantes restricciones de crédito que registran los mercados y la creciente dificultad de las empresas europeas para exportar su producción a la zona de influencia del dólar, mercados donde el grupo Levantina debe hacer frente a competidores ubicados en países emergentes con costes muy inferiores" para esta operación de saneamiento de sus ingresos.

L@s trabajadores y el pueblo de Novelda se han echado a la calle, capitaneados hasta la fecha por los lidercillos de C.C.O.O y U.G.T y, en forma de concentraciones, manifestaciones y pintadas, han mostrado su rechazo a esta estrategia capitalista de cargarle el muerto de la crisis a quien nunca tuvo la capacidad para producirla. Como trabajadores debemos dar un paso más y superar los dirigismos sindicalistas que están pidiendo la suspensión temporal de pagos como alternativa al despido, y que es una solución a la medida de los empresarios no de los trabajadores. Debemos, mediante la comunicación, la solidaridad, creando nuestro propio espacio, hacernos fuertes. Para defendernos de este y otros ataques que en el futuro se pudieran dar, es necesario que no solo los currantes de Levantina de Mármoles o Grupo Soledad, sino todos los proletarios nos reconozcamos en la imagen de los despedidos y, con una estrategia adecuada para cada ocasión, crear o dotarnos de herramientas eficaces (al margen del espectáculo mediático) para hacerles frente.
Un ex-trabajador del Grupo Soledad

“!Contra los despidos y la precariedad!”

“¡Empresarios de la levantina, os vais a ahogar en vuestra propia orina!”
(Pintadas mural de grandes dimensiones aparecidas en la entrada de Novelda y que da la bienvenida a este pueblo)


¿Para qué sirven las Viviendas de Protección Oficial?

Desde que comenzaron a construirse este tipo de viviendas se ha visto en ellas una forma barata de adquirir una casa, de conseguir un chollo. Eso si tienes la suerte de que te toque la lotería que supone la subasta de VPO (teniendo en cuenta el número que se construyen en comparación con la demanda real que hay de viviendas...). En la etapa de endeudamiento en que nos vemos inmersos, muchos ven en estas viviendas, quizá con más ilusión que antes, una salida al mismo. Incluso los empresarios. Hagamos un breve repaso a este tipo de políticas; al significado que se les quiere dar ahora precisamente; a las mejoras que pueden generar a la clase trabajadora en un principio y, a largo plazo, como puede servir para amortiguar la caída en el sector de la construcción – inmobiliario.
A partir de los años 80 se comenzó a hablar entre los arquitectos progresistas de una especie de “democratización de la vivienda” para justificar la construcción de bloques con la capacidad de aglutinar mayor número de población y aprobar proyectos que acabara lentamente con un modelo de barrio más popular y de vida en la calle (o la huerta). Por lo general, zonas compuestas por casas bajas. Con la excusa de querer potenciar una hipotética igualdad social y el derecho constitucional de todo el mundo a acceder a una vivienda como estandarte de la democracia, la población, exceptuando ciertas luchas que se fraguaron en torno a grandes ciudades (con la destrucción de chabolas y barriadas), no vio con malos ojos economizar su espacio, para que cupiese más gente. Las empresas privadas comenzaron a rediseñar el negocio de la vivienda, encontrando en la emigración de trabajadores y la acumulación de inquilinos un gran filón económico y de modelo urbano: en menos espacio podían sacar más provecho y asentar a la clase trabajadora (o a estratos marginados) donde no molestara. Es decir, en ciudades satélite o polígonos de realojamiento.
Este modelo de construcción ha ido evolucionando hasta nuestros días y ha tenido a los bloques de VPO como principal símbolo de “ayuda social” por parte del Estado. Sin embargo, tras esa imagen de igualdad entre clase sociales que quiere demostrar dicha “democratización de la vivienda”, vemos cómo por un lado, se siguen construyendo bloques mastodonte para la clase media-baja, y por otro se reservan zonas residenciales o de lujo para la venta de casas unifamiliares de gran extensión, con los privilegios y la calidad de vida que representa. Un escenario en continuo contraste con zonas más deterioradas, y con la desigualdad social que, en teoría, instituciones, constructoras y arquitectos, querían suprimir por el bien común de toda la sociedad. El problema no era, ni es, un modelo de viviendas limitado sino el tipo de gente que vive en ellas, el aprovechamiento del suelo y el espacio como mercancía para beneficiar a unos pocos privilegiados.

La especulación urbanística generada por estos y otros factores, como la limpieza de dinero negro, ha llevado a la situación actual donde la demanda de vivienda de promoción privada se ha estancado y tiende a bajar. Como resultado del desgaste en el sector inmobiliario y la dificultad que tienen las familias para hacer frente a hipotecas o la compra de una vivienda, el gobierno plantea la subvención a las empresas privadas que planifiquen viviendas de protección en sus proyectos como forma de potenciar el acceso a la vivienda y “ayudar a la población de renta baja”. El contexto que se genera con estas inyecciones de dinero a las promotoras-constructoras es de convertir las VPO en un negocio con el que acolchar las perdidas en el sector e inflar los precios de éstas construcciones. Al fin y al cabo, aunque el Estado regule las condiciones de compra, son las empresas las que fijan el precio final, amortizando gastos de inversión con este tipo de subvenciones (una parte estaría cubierta) para seguir construyendo como si no pasara nada. Es una estrategia que ya han puesto en marcha grandes promotoras para hacer frente a la famosa “crisis” que ellos mismos han provocado.

Aparte, las viviendas de protección son construidas a bajo coste, con material de poca calidad y unos acabados de pena, porque van dirigidas a un fin que genera escasos beneficios. Las zonas donde se construyen suelen estar bastante dejadas (ni reformas, ni servicios de limpieza regulares, mejoras de plazas, etc.). Incluso, si ese suelo interesa para especular o resolver conflictos sociales, la dejadez llega al punto de declararlas en estado de ruina (por ejemplo, polígono de viviendas de La Paz o los bloques de Ayuso en Murcia capital). La calidad en estas viviendas se da por hecho que va a ser inferior, aunque las hayamos pagado con los impuestos que nos arrebatan continuamente.

La necesidad de VPO no es real, porque ya existen miles de casas vacías, con las que se especula en espera de tiempos mejores y que podrían destinarse para ese objetivo o reapropiarse para quien le haga falta. Con este panorama, no podemos ver una tabla de salvación en la constitución, o las leyes, reivindicando una vivienda digna o pidiendo a toda costa que se construyan más VPO. Esta alternativa también se puede transformar en un negocio, volverse en nuestra contra, convirtiéndonos en explotados que mendigan algo que les pertenece. Hay suficientes casas para vivir dignamente y sin engordar aún más el negocio inmobiliario, solo hace falta la determinación de quienes sufrimos estas situaciones, de los afectad@s.

“La vivienda protegida sube de golpe un 30% en Murcia y Cartagena”
(Diario 20 Minutos, 9 de Abril de 2008)

“También hemos hecho más atractiva la construcción de VPO a los promotores adecuando los precios de los módulos en los que se divide la VPO según distintas zonas geográficas a los precios actuales” (José Ballesta, Consejero de Obras Públicas, Vivienda y Transportes en una entrevista para el periódico La Economía Región de Murcia, Junio de 2008)



Churra: Escombros de lujo

Esta zona es conocida por el sector inmobiliario y prensa local como la que se convertirá, de aquí a unos años, en la Bervely Hills murciana. Es un punto privilegiado de acceso a la ciudad y esto hace que el suelo esté bastante cotizado. Decenas de nuevos ricos venden cada metro cuadrado de su tierra, dejándolos en manos de promotoras que destrozan los tejados y puertas de antiguas casas de huerta. Es una forma de prevenir que nadie pueda utilizar esas viviendas mientras se aprueban los futuros proyectos de expansión previstos en torno al cinturón de la capital murciana. Por este recorrido pueden verse casas bajas aun habitadas, normalmente por gente anciana de la zona de toda la vida, junto con casas destrozadas, hechas intencionadamente ruina o solares repletos de escombros. Con un paisaje tan desolador, y hasta que lleguen los tiempos de una gran zona residencial, más que Bervely Hills, Churra se parece a Bosnia durante la guerra.
Esta táctica de presionar y acosar, llevada a cabo por promotoras e instituciones, se caracteriza por el deterioro del entorno de un barrio para expulsar a los habitantes de este y, poco a poco, cedan todos los demás a la venta de sus “antiguas y deterioradas” casas.

“Aún vivimos aquí”
(Pintada significativa en la fachada de una casa de Churra rodeada por bloques en construcción, solares y la nueva carretera que conectará la Avda. Juan Carlos 1º con la carretera de Alicante)



C. S. O. A. La Fábrica de Hielo:
Un ejemplo vivo de que Murcia no se vende


Hace meses que un grupo de personas decidió, por necesidad y como forma de luchar contra la especulación, ocupar los terrenos de una antigua nave en la pedanía murciana de Churra. Se trata de una zona azotada por el avance de los nuevos planes urbanísticos que se expanden sobre la periferia de la capital.
Este proyecto supone, entre otras cosas, romper con la dinámica derrotista, que hasta ahora caracterizaba la resistencia contra los proyectos del capital, de la forma más directa: Ocupar la huerta. Y, lo que aún es más importante, sale hacia fuera para demostrar que es posible paralizar los métodos de expulsar habitantes (algo asimilado por la mayoría de la población) para seguir construyendo miseria. Todo esto, poniendo en común problemáticas sociales, ecológicas... y dando cabida a colectivos de gente que se preocupan en desarrollar una conciencia para reaccionar ante las mismas.
En este espacio se realizan actividades como: Cultivo de huerto ecológico, conciertos a precios populares, charlas informativas y de debate, distribución de material escrito de temática social y política, elaboración de pan (horno de leña), proyecciones, etc.

Hay indicios de que actualmente estén en marcha los tramites para desalojar el lugar.

Solidaridad con La Fábrica de Hielo.
Apoyemos estas iniciativas autogestionadas y organizadas desde abajo sin la mano de instituciones
o partidos políticos.

Asambleas abiertas del centros social: Todos los martes a las 8 h. Dirección: Avenida Torre Alcaina nº8 (Churra)


Bienvenido al bando de la ... Muerte

Un año más festejamos el asesinato de nuestra huerta. Matones y especuladores campan a sus anchas extorsionando y chantajeando a huertanos y otras personas que se resisten a ver la huerta muerta. Los mismos empresarios que hoy junto a nosotros celebran este paripe hipócrita, mañana estarán riéndose de la huerta y construyendo grandes edificios, centros comerciales ayudados por el ayuntamiento y la comunidad de Murcia que saben muy bien como enriquecerse gracias a su política del construir por el simple beneficio de construir (pero esto no es eterno). Desde el CSOA La Fábrica de Hielo os animamos a que os impliquéis en esta lucha. Formando grupos de barrio y realizando asambleas, debates, manifestaciones, incluso okupando la huerta, bancales o espacios abandonados para devolvérselos al barrio, a su gente.


Si la huerta muere... okupa y resiste

(Panfleto repartido durante el último Bando de la Huerta, fiesta popular en
la ciudad de Murcia en honor a la huerta tradicional)



Señales de humo... Contra la alta velocidad


(Editorial de la “Hoja de resistencia contra el TAV” (Tren de Alta Velocidad en el País Vasco) nº 19. Junio de 2008)

Prácticas políticas que se inventaron para servirnos pero nos atan, nos esclavizan, nos callan y nos limitan... Prácticas que pretenden aglutinar y ¿qué consiguen? Dividir, delegar, desmovilizar, claudicar... Discursos vacíos que no cuestionan la opresión, ni tan siquiera las causas que generan estos proyectos, como si de un problema de mala gestión se tratase. Discursos y prácticas de intervención política que lo único que hacen es fortalecer lo que pretendemos destruir: el poder, la sumisión, la especialización, las vanguardias...Prácticas teñidas de verde para complacernos, prácticas teñidas de rojo para disimular... ¿Dónde está la libertad si delegamos?.

El hedor a mierda os delata, después ya no quedará aire que respirar, solo seres uniformes con comportamientos uniformes, mascaras de oxígeno de color verde. Y pensaremos que ha ocurrido, en si hemos tomado parte... La lucha contra el TAV debe ser la lucha contra el capital, contra las formas de organización social vigentes, contra la sumisión, contra la propiedad, contra la delegación, contra la resignación. Donde los oprimidos luchemos en primera persona contra quienes pretenden someternos. Donde la única consigna válida sea la lucha de clases. Donde el amor que llevamos dentro lo transformemos en odio hacia quienes pretenden callarnos... Donde el odio que llevamos dentro lo transformemos en amor para seguir luchando...
El TAV nos obliga a pelear ahora. Cuando hoy más que nunca están vigentes nuestras ideas. Las mismas que nos hicieron asumir la cárcel en tantas luchas ecologistas. Las mismas que nos llevaron a no participar en diferentes ejércitos, las mismas que nos llevaron a romper puertas y abrir ventanas para no hipotecar nuestras vidas, las mismas que nos llevaron a sobrevivir sin prostituir nuestros brazos en fábricas de muerte. Las mismas ideas que nos hacen luchar hoy y ahora con todas las herramientas que tenemos a nuestro alcance. Sin dirigentes, ni dirigidos, sin mediadores, ni vanguardias, por la utopía, por la autogestión...

Más indios y ningún jefe. Autoorganización y lucha...

(Varias personas relacionas con la lucha contra el TAV han sido reprimidas o detenidas durante este año intentando paralizar un proyecto que arrasa, al igual que aquí y otros puntos del estado, con pueblos y montañas por el triunfo de la economía y el progreso)



Manual práctico de autodefensa proletaria

Este manual pretende rechazar en la práctica la explotación laboral y exponer mínimamente otras consecuencias que conlleva su normalización social. También nos puede servir de herramienta en situaciones de conflicto laboral (despidos, acoso...) o como simple información “en caso de”.
En él se han recopilado diferentes maneras con las que entorpecer la producción, presionar a nuestra empresa o solidarizarse con otros trabajadores. Estas han sido utilizadas ahora y hace cien años, pero siguen siendo igualmente eficaces debido a nuestra condición de clase trabajadora. Esta, aunque menos ruidosa en los tiempos que corren, sigue levantándose cada día para cumplir con una contradictoria obligación: mantener la riqueza de grandes corporaciones, empresas y multinacionales capitalistas.
Hemos dado prioridad a un análisis actual, aunque sin profundizar demasiado, de la organización del curro (subcontratación, inestabilidad...) y a las condiciones generales en las que lo desempeñamos. Hemos ojeado el papel mediador de quien dice defendernos cuando la cosa se complica y que, cuando nos damos la vuelta, ya ha negociado por nosotros para mantener su chiringuito sin revuelos. Esto demuestra el inmovilismo que fomentan los sindicatos en algunas situaciones laborales.
La idea es distribuirlo de forma gratuita entre grupos de trabajadores más o menos concienciados a los que podamos llegar o que tengamos al lado. Romper el hielo de una jornada laboral y las fronteras estereotipadas que nos han impuesto. Lo que explica el texto no tiene caducidad inmediata así que su distribución puede mantenerse en el tiempo y en el espacio, llevándola a cabo en el momento más oportuno que nos encontremos (huelgas, asambleas de trabajadores, cola del paro)
En nuestro caso forma parte de una “campaña” más amplia que estamos intentando llevar adelante en algunos puntos del sureste de la península, con la edición de pegatinas, carteles, etc. Es decir, el manual tiene su continuidad en la calle con el objetivo de entablar comunicación con otros trabajadores puteados como nosotros.

En la edición de este pequeño manual han colaborado, humana y económicamente, otros colectivos para apoyar la propuesta y sobretodo con la idea de extenderla. Desde aquí nuestro agradecimiento por implicarse.

Cantidad en distribución: 10.000 ejemplares
Tamaño del manual 10,5 x 14,5,
a una tinta con portada en papel satinado

Elabora y edita : El Percal (Murcia)
Apoya: Ruptura (Madrid)


Editado en Murcia y fotocopiable
Para mandarnos noticias, pedir algún número anterior o ponerse en contacto, escribir a: elpercal2007@hotmail.com


martes, 8 de abril de 2008

Manual práctico de autodefensa proletaria

Este manual pretende rechazar en la práctica la explotación laboral y exponer mínimamente otras consecuencias que conlleva su normalización en la sociedad. También nos puede servir de herramienta en situaciones de conflicto laboral (despidos, acoso...) o como simple información “en caso de”.

En él se han recopilado diferentes maneras con las que entorpecer la producción, presionar a nuestra empresa o solidarizarse con otros trabajadores. Estas han sido utilizadas ahora y hace cien años, pero siguen siendo igualmente eficaces debido a nuestra condición de clase trabajadora. Menos ruidosa en los tiempos que corren, pero que sigue levantándose cada día para cumplir con una contradictoria obligación: mantener la riqueza de grandes corporaciones, empresas y multinacionales capitalistas.

Hemos dado prioridad a un análisis actual, aunque sin profundizar demasiado, de la organización del curro (subcontratación, inestabilidad...) y a las condiciones generales en la que lo desempeñamos. Hemos ojeado el papel mediador de quien dice defendernos cuando la cosa se complica y que, cuando nos damos la vuelta, ya ha negociado por nosotros para mantener su chiringuito sin revuelos. Esto demuestra, el inmovilismo que fomentan los sindicatos en algunas situaciones laborales.

La idea es distribuir el manual de forma gratuita entre grupos de trabajadores más o menos concienciados a los que podamos llegar o que tengamos al lado. Romper el hielo de una jornada laboral y las fronteras estereotipadas que nos han impuesto. Lo que explica el texto no tiene caducidad inmediata así que su distribución puede mantenerse en el tiempo y en el espacio, llevándola a cabo en el momento más oportuno que nos encontremos (huelgas, asambleas de trabajadores, cola del paro)

En nuestro caso forma parte de una “campaña” más amplia que estamos intentando llevar adelante, con la edición de pegatinas, carteles, etc. Es decir, el manual tiene su continuidad en la calle con el objetivo de entablar comunicación con otros trabajadores puteados como nosotros.

En la edición de este pequeño manual han colaborado, humana y económicamente, otros colectivos para llevar adelante la propuesta y con la idea de extenderla. Desde aquí nuestro agradecimiento por implicarse.

Grupo El Percal


El manual se conforma de:

-Introducción
-Plantemos cara a la explotación laboral
-La unión de los trabajadores es la perdición de los empresarios
-Formas de bloquear la producción entorpecer el ritmo productivo en nuestros lugares de trabajo
-Autoorganización y lucha
-Y para concluir, en paro pero no parados.

Cantidad en distribución: 10.000 ejemplares
Tamaño del manual 10,5 x 14,5, a una tinta con portada en papel satinado

Elabora y edita : El Percal (Murcia)
Apoya: Ruptura (Madrid)

Para pedir copias o más información:
(La distribución del manual es gratuita pero los gastos de envío correrán a cuenta de los interesados)


sábado, 22 de diciembre de 2007

El Percal - Diciembre de 2007

Los problemas crecen
Las crisis del capital, que las paguen los ricos



“Expertos y empresarios prevén una intensa desaceleración de la economía española en 2008” (Periódico Local Crónica, 29 de octubre de 2007)

”El pan y la leche subirán un 40% y u 20% antes de que acabe el año”

(Periódico 20 minutos, 6 de septiembre de 2007)

“El paro ya afecta a 48.669 trabajadores tras subir un 1,8% al acabar la temporada turística” (Periódico Local Crónica, 6 de noviembre de 2007)”

“España está entre los países más expuestos a la crisis hipotecaria, asegura el FMI”

(Periódico La Verdad, 13 de noviembre de 2007)

Suena el río con aguas de crisis. El inevitable desmorone de la burbuja inmobiliaria, la creciente deslocalización de empresas y el alto coste de la vida que trae consigo todo lo anterior, hablan de crisis económica y laboral, hablan de cierre de empresas y precarización, más aún, del empleo.
Trataremos aquí la crisis desde el punto de vista de medida coercitiva, es decir, como un elemento propio del sistema económico que mueve las riendas de este cotarro (Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, Ibex35, centros financieros, grandes inversores, accionistas mayoritarios...). Junto con la competitividad que esta “crisis” genera, componen el ABC de la explotación capitalista y complica una posible respuesta del conjunto de los trabajadores.
Crisis y competitividad son dos medidas coercitivas, ya que actúan como muro de carga, para obligarnos a aceptar unas condiciones de trabajo miserables y mantener un nivel de vida cada vez más bajo y caro (eso sin entrar a profundizar en el tipo de relaciones humanas, alienantes y monótonas, que generan). Caminan de la mano, de tal forma que la crisis provoca un aumento del paro. La mano de obra excedente constituye una medida de presión para los trabajadores en activo que les obliga a ceder terreno, conquistas laborales y competir entre la propia clase (la clase obrera, término eliminado del vocabulario habitual para mayor gustazo de los mandamases de la producción y arquitectos de la vida social) por ver quién se reparte las migajas del jefe o quién es obligado a caer en la espiral de la precariedad, la miseria o la caridad.
La situación se acentúa con la llegada desde las zonas empobrecidas del planeta, aquellas donde el capital no necesita de la máscara de la paz social y la democracia, de un proletariado expuesto a unas condiciones de vida extremas, penosas, que le hacen ser el cebo excelente para aceptar cualquier oferta laboral.
A esto se añade la total domesticación de unos sindicatos que, se vistan como se vistan, verde, rojo o azul, no son más que una extensión de la red de arrastre capitalista que con cada nuevo conflicto nacido de esta situación económica se muestran más claramente como lo que son: una medida de control interna de la clase empresarial y un freno de emergencia para el gobierno cuando algún conflicto obrero se les escapa de las manos.
Poco a poco, se van eliminando las conquistas sociales y laborales que pudieran haber quedado en pie de las luchas obreras masivas que surgieron a raíz de múltiples reformas económicas y la reconversión industrial de los años 60-70-80 que convulsionaron Europa.
El centrifugado de estos elementos conforma un panorama nada alentador para los explotados a la hora de encajar todas las consecuencias de ciertos “desequilibrios económicos”. Pero, sorprende el echar la vista atrás y comprobar que ante las crisis de igual o mayor alcance, la clase dominante, los propietarios de los medios de producción y el capital, han salido adelante sin mayores problemas. Exceptuando algún honroso salto por la ventana durante el crack de la bolsa americana en 1929, las clases altas de la sociedad (no nos referimos aquí a los pequeños empresarios, las subcontratas y demás capitalistas “de segunda”) se perpetúan como poseedores dejando un reguero de desposeídos que, finalizada la crisis, lo son aún más.
Con la amenaza del hundimiento del chiringuito de la construcción y el “sálvese quien pueda” que se está produciendo en bancos y empresas inmobiliarias (1), los flujos de capital se desvían hacia otras orillas más seguras y empieza a inyectarse dinero en sectores como el energético, vías de comunicación para mercancías, etc. De esta manera, si todo se viene abajo, ellos seguirán bebiendo champán sobre la montaña de quiebras, bancarrotas y parados que sus maniobras suelen dejar tras de sí.
Como trabajadores, parados, excluidos, desheredados... en definitiva proletarios, está en nuestra mano que el miedo cambie de bando. Que empiecen a pagar caro la crisis con la que generan inseguridad y desarraigo a los mismos de siempre, la crisis que, para renovar el Mercado, nos hacen tragar históricamente cada cierto intervalo de tiempo.

¡Plantemos cara a la explotación laboral y a las desigualdades sociales!
Autoorganización y lucha, fuera y dentro del tajo


(1) Cierre de tiendas inmobiliarias a pequeña escala, el mayor índice de desempleo se sitúa los últimos meses en el sector de la construcción, más rigidez en las condiciones para solicitar préstamos hipotecarios debido al endeudamiento de la población...


¡El “Mileurismo” va a llegaaar!

Ya que hablamos de crisis, queremos hacer referencia a esa etiqueta mediática que viene oyéndose desde hace tiempo y que desvirtúa un problema conocido por todos: el mileurismo. Definición que da a entender algo tan alejado de la realidad como que el salario medio de los trabajadores ronda los mil euros al mes. Con este mensaje, se resta importancia a nuestra condiciones de vida reales y a las medidas llevadas a cabo para regenerar la economía a costa de empleos de mierda, horarios interminables y salarios de chiste, pero sin pizca de gracia. Al mismo tiempo, se consigue acolchar de alguna manera, cara a la opinión pública, cualquier indicio de crisis dando por hecho que los sueldos están por encima de lo que en realidad están.
Por otra parte, sería una equivocación, si tenemos en cuenta lo cara que está la vida, conformarse con sueldos de mil euros que no llegarían a cubrir, sin endeudarnos hasta las cejas con el banco, las cantidades descompensadas que nos piden por facturas, hipotecas, alquileres, multas...

¡Ni mileuristas, ni milongas... basta de vivir en la precariedad!



Salvemos El Gorguel y La Muela (Cartagena)

Ya ha sido presentado el estudio de viabilidad socio-económica para la construcción de una gigantesca dársena de almacenaje (HUB) en El Gorguel como extensión al puerto industrial de Cartagena (una bomba en potencia, mezcla de amasijos de hierros, diques, chimeneas, depósitos de petróleo y gasíferos a punta pala).
La misma autoridad portuaria, que se beneficiará de esta terminal de contenedores, es la que ha encargado el estudio y, lógicamente, ya apunta que los datos “no pueden ser más positivos”, sobretodo para ellos. Como razón de peso para continuar con el proyecto, que restaría importancia a la desaparición de este paraje natural y la expulsión de los vecinos de la zona, la Autoridad Portuaria vuelve a hacer hincapié en la creación de 3.000 empleos. Sólo faltaría ver en qué condiciones y su “viabilidad” sobre la población.

Por otro lado, en la zona cartagenera de Los Jarales (Perín) está prevista la instalación de una cantera de mármol que afectará, ya que invade directamente zona protegida, a la Sierra de la Muela y Cabo Tiñoso. Algunos vecinos de la zona afectada, especialmente sensibles al impacto que tendrán el paso camiones de gran tonelaje y los explosivos utilizados para extraer mármol, ya recogen firmas en contra de la cantera.
La máquina urbanizadora necesita más madera para seguir produciendo. Aprovecha cualquier rincón inóspito o vacío legal para ganar tiempo, mientras llegan las denuncias, pasando desapercibida gracias a los conocidos chanchullos con los ayuntamientos.

Paremos los planes de futuro para el bolsillo de algunos privilegiados!
¡El monte es de tod@s!


El sistema funciona...

-El pasado 6 de septiembre un trabajador de una cantera en Lorca (Murcia) fue trasladado herido grave al Hospital de la Arrixaca tras haber sufrido un accidente laboral en el que se cortó la mano.
-El 11 de septiembre un albañil falleció en Yecla (Murcia) tras sufrir un accidente laboral en la obra donde trabajaba.
-El 19 de septiembre otro trabajador resultó herido muy grave en un cantera en Caravaca de la cruz (Murcia).
-El 4 de octubre muere en la zona de las Atalayas (Murcia ciudad) un albañil de 22 años tras caer de un andamio desde un octavo piso. Trabajaba para la empresa constructora Damai
-22 de noviembre, muere un agricultor en Aguilas (Murcia) tras sufrir un accidente laboral con un tractor.


Tren de Alta Rentabilidad

“La patronal murciana abre una ofensiva para exigir el tren de alta velocidad”
(Periódico La Verdad, 6 de noviembre de 2007)


Como no podía ser de otra manera, el desarrollo organizado, especialmente devastador en la costa sureste mediterránea, necesitaba fijar nuevas vías de comunicación para potenciar ese turismo de lujo que se plantea desde Valencia hasta Almería pasando, claro está, por Murcia. Pretende conseguir un desplazamiento rápido y sin sobresaltos, a quienes pueden permitírselo de forma habitual, para llegar a la fortaleza e hilera de resorts y hacer más apetecibles y cercanos esos puntos de nueva construcción en cualquier montaña del litoral. Qué mejor reclamo que un tren de alta velocidad que te ponga, en una hora y poco, en primera línea de playa o tu campo de golf favorito .¿Que más se podría pedir?.
Efectivamente, una vez más, nos quejamos sólo por vicio. Echemos un vistazo a los efectos que este proyecto, que ya ha comenzado sus obras sigilosamente hasta hace bien poco por motivos políticos y de financiación, va a tener sobre nuestras, de por si, ninguneadas vidas.
Socialmente: Aunque el proyecto del AVE Madrid – Castilla la Mancha-Valencia-Murcia vaya revestido con un mensaje por mejorar la comunicación ferroviaria (competitividad, progreso, “sostenibilidad”, bla, bla...) entre los pueblos de la Región, y de por hecho que esté al alcance de toda población, obviamente su trazado (tanto la opción inicial por el sudeste como por el norte) y planteamiento pone en cuestión descaradamente nuestra inteligencia.
En primer lugar, durante años estamos “acostumbrados” a un equipamiento que se encuentra en unas condiciones penosas (vagones hechos polvo, espacio reducido, interminables horas de trayecto, un continuo y ruidoso contoneo...), y esto lo sabrá cualquier persona que haya cogido un tren para moverse por los pueblos del interior y costa sureste. El cual, solo cumple su misión mercantil de acumular pasajeros, a precios abusivos en relación al servicio que ofrece, dejar atrás la gran cantidad de peligrosos pasos a nivel y llegar, si es posible, sin descarrilamientos o algún tipo de avería.
Ahora, precisamente el momento de encajar las fichas que se han puesto en juego con el despliegue especulativo (de vacas flacas), se nos viene a encasquetar la necesidad de renovar, de otro tren que circule más rápido, de mas cemento, de más vías y de modificar los recorridos. El proyecto aprobado se desdoblaría, según el trazado actual, para el uso cercanías, carga de mercancías y vagones de alta velocidad. Trazado que no unirá pueblos visiblemente degradados, donde habría que enlazar las vías ferroviarias ya existentes, pero sí realizará parada en localidades donde confluyen importantes proyectos inmobiliarios (Ej: próximo aeropuerto de Corvera (Murcia) ) y campos de golf.
En segundo lugar, el AVE está provocando a su paso las protestas de vecinos que quieren que su barrio no se parta en dos, como en Callosa del Segura (Alicante), al antojo del Santo Progreso. Otros, como en Beniaján (Murcia), han sido expropiados directamente de sus casas y los que quedan exigen el soterramiento de las vías que, al día de hoy, ya han pasado por encima de huertas y casas. O simplemente quienes no quieren que se destruyan ciertas zonas protegidas o de recreo popular.
Económicamente: Ya han sido numerosos los colectivos agrarios que han comunicado su preocupación ante las consecuencias que el AVE va a tener sobre zonas de cultivo, como en la Vega Baja (Alicante), y principal medio de subsistencia para muchas localidades donde la actividad agrícola es la mayoritaria. Se dejaría, una vez más, pan para hoy, hambre para mañana, todo el peso socio-económico en manos del sector servicios y a la intemperie de una forma de subsistencia propensa a cambios bruscos para los trabajadores.
A pie de calle, la imagen elitista que desprende un tren de alta velocidad se verá reflejada en el precio de los billetes (que incluirá el alto coste en la construcción de infraestructuras). La mayoría de los trabajadores lo tendríamos bastante complicado para usar este medio de transporte de forma habitual, porque va dirigido a un estrato social que reclama directamente primera clase en sus billetes.
Ambientalmente: Este proyecto está sepultando, al igual que lo hace en otros puntos del estado (Euzkadi, Catalunya, Andalucía...), kilómetros y kilómetros de tierra, llevándose a su paso fauna y flora protegida que jamás recuperaremos si no hacemos algo para evitarlo.
Además de lo comentado hasta aquí, el tren de alta velocidad simboliza un modelo de movilidad y transporte que sobrepasa la utilidad para nadar en el derroche. Tras él, existe una importante relación con otros factores productivos, aparte de los visibles procesos de urbanización, como son los circuitos de consumo a gran escala, el tráfico internacional de mercancías, la distribución de productos en otros puntos de la geografía donde doblaran el precio de venta, el desarrollo tecnológico, etc. Factores que generan también suculentos beneficios a las altas esferas de Poder. Sin ir más lejos, el pasado 8 de noviembre se celebró en Castellón la Cumbre Corredor Mediterráneo que reúne a los alcaldes de las principales ciudades mediterráneas para concretar una plataforma ferroviaria que enlace éstas con Europa (desde Tarragona hasta Cádiz) a través de un trazado por el litoral y así promocionar el sector turístico.

Más del 80% de los tramos entre Madrid y Valencia están en obras y el resto adjudicados. Algunas de las empresas responsables de la construcción de este nuevo AVE son:

Aldesa Construcciones (Compañía que ha recibido más adjudicaciones),Ploder, Vias y Construcciones S.A., Rover Alcisa S.A., Comsa, Acciona Infraestructuras, Construcciones Sando, Etc.

Para bloquear el AVE solo hay un camino,
concienciación y lucha activa


Responsables directos de la destrucción de nuestro entorno y el encarecimiento de la vivienda

Empresas constructoras, inversoras o inmobiliarias del proyecto



Marina de Cope (Lorca y Aguilas)
Landmark Spain y EDSA, Iberdrola Inmobiliaria, Actura (inmobiliaria de Bancaja), Summa (inmobiliaria de Cajamurcia),Cajamadrid, Valleduero y Extremalia

Aguilas Golf Resort(Aguilas ,Murcia.
En La Zerrichera – Sierra de La Almenara)
Grupo Hispania, Expansión (Grupo Lar), C-15, Invertur,
Desarrollo de Aymerich Golf Magnament,
Riofisa (Caixa Cataluña)

Isla del Fraile Resort
(Aguilas-Murcia)
Dursa Properties Inmobiliaria

Terrenos para urbanizar y
especular en Sierra Espuña
(Alhama de Murcia):
Nimonter, Verdimar y Monte

Especulación en Mula:
Artecons y Urbincosta,
Galva Inversiones(Mula Resorts)

Proyecto Novo Cartagho (Cartagena):
Montemayor Mar Menor S.L. y Aguirene

Otras empresas vinculadas a la proyección de zonas residenciales de lujo o campos de golf:

Profusa (Inmobiliaria de El Pozo), Nozar, Magma Turismo, Planning Golf, Dyrecto, Irea, Luxury life Stile Hotels & Resorts, Polaris World...

¡DEMUESTRA TU RECHAZO!


Del expolio a la persecución

El pasado julio el gobierno aprobó poner en marcha para el año 2009 el sistema SIVE (Servicio Integrado de Vigilancia Exterior) en la Región de Murcia para evitar la llegada de sinpapeles a través de la costa y sin dinero

Los reductos por donde escapar de la desertización, la falta de recursos básicos para subsistir y las desigualdades sociales extremas, muchas de ellas esponsorizadas por países más desarrollados, escapan a la lógica civilizadora, mercantil y paternalista del primer mundo.
Desde el agosto pasado están llegando a las costas murcianas (Calblanque, El Portus, Aguilas, La Manga, Cabo de Palos...) gran cantidad de pateras con inmigrantes procedentes en su mayoría de Argelia y Marruecos en busca de una “vida mejor”. Esta situación parece resultar incómoda, principalmente a los sectores políticos, pues genera una mala imagen cara al exterior y a los intereses turísticos de la zona.
Una de las más insólitas llegadas en patera tuvo lugar en las playas de La Manga del Mar Menor, allá por el pasado mes de octubre, donde coincidieron turistas de relax en pleno baño e inmigrantes con principios de hipotermia y deshidratados. Obviamente, no culpamos aquí de la migración masiva de los países pobres a los ricos a los bañistas, pero este desembarco sí refleja las contradicciones de un mundo mejor y mas civilizado.
Tras unas causas que saltan a la vista, miseria y muerte, el argumento que anteponen las instituciones a la necesidad de medidas de control (vallas fronterizas y SIVE) y represión (Centros de Internamiento para Extranjeros) es el de perseguir a las mafias que extorsionan a estos inmigrantes en sus países de origen. En la práctica, las únicas deportaciones, detenciones y encarcelaciones que se producen son contra inmigrantes, no contra esas supuestas mafias. Ellos son el objetivo. Sin contar con la persecución policial que se lleva a cabo, a diario y de manera chulesca, en ciudades y pueblos que identifica rápidamente inmigración con delincuencia o drogas.
Como ya ocurrió en la costa andaluza y las Islas Canarias con el blindaje marítimo en respuesta a la llegada de pateras, el gobierno, a forma de parche, extiende la vigilancia férrea con la aprobación del SIVE para la costa murciana, que empezará a desarrollar sus instalaciones a partir del 2008.
Este sistema, aparte de un gran negocio para las empresas de seguridad a las que sean adjudicadas la instalación y el transporte, consiste en la puesta en marcha de potentes radares térmicos para detectar el movimiento de personas sobre el mar, embarcaciones especiales (lanchas y barcos para desplazar a los detenidos) y medios tanto aéreos como terrestres para rastrear las zonas más “problemáticas”. Esto irá seguido de la construcción de nuevos centros de internamiento para inmigrantes (en la actualidad hay uno funcionando en Sangonera la Verde (Murcia) con capacidad para 60 presos) donde recluir a estas personas hasta que sean deportadas o resuelta su condición legal. Una guerra encubierta en toda regla.

¡Ningún sistema fronterizo puede parar las consecuencias de la extrema riqueza!
¡Basta de cacheos selectivos a inmigrantes en las calles!

ProExport: Un ejemplo de amasar fortuna sin prejuicios

“La asociación ProExport de Murcia crea el primer portal de internet español dedicado a los inmigrantes. El portal está destinado a facilitar a los inmigrantes todo tipo de trámites burocráticos, asesorarles e integrarles en la sociedad”

Las condiciones de trabajo en el sector agrícola son ,sin lugar a dudas, las peores. El peón agrícola trabaja una media de diez horas al día (o más, según la campaña) por salarios que rara vez superan de tres o cinco euros la hora. La siniestrabilidad laboral en esta profesión ya les sitúa como una de las profesiones con más accidentes junto a la industria y la minería. Este es un breve resumen extraído de un informe de la OIT (Organización Internacional el Trabajo). Si echamos un vistazo a la realidad, que siempre será menos neutra, observaremos que la cosa se agudiza. Este sector, es el reino de las irregularidades y el marco de los sinpapeles. Una situación que resulta, como mínimo, poco atrayente para cualquier currante, no digamos ya para los currantes de los llamados países primer-mundistas.
Escudados en una supuesta competencia a nivel mundial de los países subdesarrollados, que les impide mejorar sus condiciones laborales, las empresas hortofrutícolas tocan a rebato y ofertan su esclavitud mal pagada a los habitantes de países empobrecidos. Lo hacen con la esperanza de que acepten con alegría y agradecimiento sus trabajos miserables. Estos a su vez, debatiéndose entre la exclusión o la explotación se resignan a esta última. El negocio sale redondo.
Pero en medio de esta opereta capitalista actúan personajes nada convincentes. El actual presidente de Proexport es Miguel Duran, un habitual de estas páginas por estar metido en cuantos negocios traten del expolio sin miramientos a la población. Propietario de varias inmobiliarias y accionista del grupo Quórum Capital, campa a sus anchas en la especulación urbanística que construirá 4.000 viviendas en los terrenos donde antes se ubicaba la empresa ZINSA de Cartagena.
Además, este moderno terrateniente, decidió ampliar sus horizontes de abuso a través de los invernaderos y el tomate. Trasladó parte del capital a Marruecos.” Las empresas productoras del Grupo Durán, tienen más de tres mil personas contratadas entre España y Marruecos, además tenemos tres almacenes de confección que ocupan en plena campaña otros 700” (Miguel Durán en una entrevista con motivo del galardón a la innovación tecnológica, que ganó debido al diseño de unos invernaderos más eficientes)
La supuesta competencia a nivel extranjero, también está en sus manos. Estos modernos traficantes de esclavos se visten con la piel de cordero de la tolerancia para aumentar sus beneficios. Los dueños de la economía son los responsables de la miseria a lo largo y ancho del planeta. Los lobby como ProExport son los responsables directos del empobrecimiento de las condiciones laborales de las que habla la OIT y difícilmente la solución estará en sus manos. En esta nueva maniobra, con el talante que exigen unos tiempos de tiránica tolerancia, lo único que se pretende es seguir atrayendo trabajadores en unas condiciones de vida más precarias que los nativos. Personas que estén dispuestas a tragar con lo que sea para seguir manteniendo su amplio margen de beneficios, un margen que les permita seguir invirtiendo en cuantos negocios se les antoje.
Desde una visión empresarial, cuantos más vengan, mayor será la competencia y más se podrán bajar las condiciones laborales. Es con la unión entre trabajadores, entre foráneos y locales, como desterraremos a los dueños de la pobreza.

¡No queremos que nos toleren, queremos que nos devuelvan nuestras vidas!


¿Medios de comunicación?

(...) Éstos son los grandes amplificadores de las amenazas, los peligros y las construcciones terroríficas. De hecho, son su gran materia prima. Son las Noticias, el hecho espectacular que capta lectores, engancha a oyentes y atrapa a la audiencia. Así, son los primeros interesados en reproducir los peligros, a menudo porque comparten las mismas vinculaciones políticas y/o económicas que se esconden tras algunos temores.
Pero son también constructores de auténticos fantasmas y distribuidores del miedo. Es por esto que, imbricados en todos los juegos de poder, en las luchas por el dominio y el control, implicados en definitiva en la reproducción del modelo social, desarrollan un papel crucial en la difusión del miedo. Aunque los medios de comunicación pueden arrojar luz sobre fraudes y escándalos de corrupción de todo tipo, también pueden construir auténticas cortinas que inviten a la no reflexión, a las posturas acríticas, a la más profunda pasividad. Así, mantienen a la sociedad en los niveles de ignorancia óptimos para realizar las operaciones terroríficas, ya sea con el silencio o, en el otro extremo, con la saturación informativa (...)

Material escrito disponible y que puedes conseguir, de forma gratuita, a través de nuestro correo electrónico:

Manual práctico de autodefensa proletaria ¡Plantemos cara a la explotación laboral!

Un repaso al mundo laboral y a algunos aspectos, tanto económicos como humanos, que se desprenden de nuestra relación con él. Apuntes sobre la organización de los trabajadores y la mediación pactada de los sindicatos con los organizadores del trabajo. Algunos consejos prácticos, al alcance de todos, para bloquear la producción en tu empresa o aminorar el ritmo de trabajo como forma de reivindicar mejoras en nuestras condiciones laborales.

Jamás el turismo causó tanta destrucción

Un breve recorrido a los aspectos menos visibles de la evolución laboral, urbanística, social, etc. de la Región de Murcia. Como, de un tiempo a esta parte, el empeño de la clase empresarial por convertir esta ciudad en un negocio está dando sus frutos.

¿Qué está pasando en los centros de menores?

Hoja informativa sobre la situación actual que sufren cientos de menores encerrados, el provecho económico que sacan muchas asociaciones u ONG´S de la misma y que podemos hacer desde fuera...

Conflictos urbanísticos y luchas vecinales

Amplio dossier sobre diferentes ejemplos de luchas contra la especulación urbanística sin intermediarios políticos (Granada, Burgos, Valladolid, Valencia, etc.) y como se fueron sobrellevando estas experiencias.


Editado en Murcia y fotocopiable

Para mandarnos noticias, pedir algún número anterior o ponerse en contacto, escribir a: elpercal2007@hotmail.com

viernes, 7 de septiembre de 2007

El Percal

Boletín informativo desde la calle. Septiembre de 2007

Indice
-En punto muerto… Un vistazo a fondo al movimiento contra la especulación urbanística en algunos rincones del estado
-El sistema funciona...
-HUB: una mentira flotante
-CHC no paga a sus trabajadores
-Deslocalizar la miseria. Apuntes rapidillos sobre la deslocalización de empresas y sus consecuencias para l@s trabajadores/as


En punto muerto...Un vistazo a fondo al movimiento contra la especulación urbanística en algunos rincones del estado

Ya en números anteriores hemos hablado, por encima (manifestaciones en defensa del litoral, sellados de tiendas y promotoras inmobiliarias, concentraciones contra proyectos urbanísticos en pueblos, etc.), sobre la evolución de distintos grupos sociales opuestos a la instauración definitiva, e irrecuperable, de un gran paraíso artificial de cemento y césped a lo largo de la península. Este traerá consigo, como ya explica la abundante información que circula en la calle, la destrucción de las pocas zonas vírgenes que quedan tanto en la costa (Almería-Murcia) como en el interior de la península, la desaparición de formas de supervivencia a pequeña escala, como es la huerta, en los pueblos donde aún se desarrollan, etc. Y, ni qué decir tiene, el gran negocio (motor actual de la economía, según la clase empresarial) que esto supone para grupos muy reducidos dentro del mercado capitalista. Hasta aquí, todos estamos de acuerdo con el planteamiento inicial de luchar por nuestro entorno, en defensa de la poca tierra que queda y las consecuencias a largo plazo que esto tiene para la clase trabajadora.

Pero, dentro de esta oposición real y palpable, donde participa una parte importante de la población, importante en cuanto que puede cambiar algo si se lo propone, existen diferentes maneras de plantear qué formas de presión se deben utilizar contra los culpables directos e indirectos (menos visibles pero que contribuyen a la situación difícil en la que nos encontramos) de lo que hemos venido llamando la especulación urbanística. A su vez, existen intereses distintos y que han influido en el desarrollo de luchas que se suponían estaban al margen de intereses partidistas, para bajar el nivel de confrontación y aliviar, por otros cauces como el voto, la sensación de impotencia que mucha gente tiene al verse como simples espectadores de lo que está ocurriendo.
A cuento de esto, vemos necesario hacer, siempre a modo de contribución, un repaso de lo que han supuesto los últimos años tanto en el aspecto reivindicativo de ciertas luchas así como de las formas que han ido adquiriendo con el paso del tiempo.

En este movimiento podemos encontrar tres grupos, en ocasiones, no muy bien diferenciados:

1. Los que necesitan sacar beneficio electoral y ganar afiliados (PSOE, IU, Los Verdes, CC. OO ...) utilizando como reclamo la lucha contra la especulación sin llegar a cuestionar, ya no el sistema capitalista culpable de lo que está ocurriendo, sino el entramado especulativo en si. En definitiva, llevarlo a su terreno con palabras bonitas. Cuando se habla de corrupción, conscientes de sus trapicheos y amistades de conveniencia que deben mantener, echan balones fuera sin profundizar. Todos nos podemos hacer una idea del circo que supone moverse en la ciénaga política de Ayuntamientos, concejales, acuerdos para gobernar, etc. Este grupo ha ganado importancia, poco a poco, en las plataformas ciudadanas, organizaciones sociales... que tratamos a continuación.

2. El grupo que más apoyo ha conseguido entre la población. Está formado por una extensa amalgama de colectivos, organizaciones y asociaciones de vecinos (Ecologistas en Acción, ANSE (Asociación de naturalistas), AA.VV. el Garruchal...) que se unen ocasionalmente (y nos costa que, en algunos casos, sin ningún tipo de debate previo) a modo de plataformas para manifestarse a gran escala contra los símbolos más importantes de la especulación urbanística a nivel local o nacional. Las cuales iniciaron su andadura desvinculándose claramente de cualquier partido político o sindicato que les atara “políticamente hablando”.
Sus planteamientos van un poco más allá del anterior grupo en cuanto a crítica se refiere. Realizan análisis completos, y bien desarrollados en términos de investigación, sobre la situación legal, ecológica, económica, demográfica... de las leyes que se van aprobando, del estado de zonas muy concretas que se están destruyendo, de los trapicheos políticos, sobre futuros proyectos urbanísticos, etc. Estos sirven a buena parte de la población, que no tiene acceso directo a dicha información o lo desconoce por completo, para hacerse una idea de lo que está pasando a su alrededor con cifras y estudios muy concretos.
Sin embargo, nunca terminan por relacionar, o cuestionar abiertamente, la especulación y la destrucción del territorio como consecuencia de un sistema productivo y social (verdadera raíz del problema) que no sólo arrasa con montes o provoca subidas en el precio de la vivienda, sino que también nos coloca a la clase trabajadora en una situación muy complicada. Demuestran su rechazo a la especulación urbanística como algo separado de todo lod emás, apostando por un “modelo de desarrollo sostenible” difícilmente aplicable a ojos de cualquier empresario emprendedor con ganas de conseguir dinero rápido y dentro del marco capitalista que sufrimos.

3. Por último, también a nivel estatal y donde obviamente nos incluimos debido nuestro planteamiento crítico, podemos englobar a aquellos grupos que relacionan el problema de la vivienda, la destrucción de la naturaleza, la especulación salvaje, la extensión del cemento... como epicentro de la economía actual y algo inseparable a otras consecuencias de la democracia capitalista (explotación laboral, subida de precios en los recursos básicos para la supervivencia, etc.). Aún contando con gran cantidad de textos e información que profundiza en lo dicho anteriormente, rara vez apuesta por movilizar a la gente, sacar esa crítica a la calle (excepto en conflictos muy concretos o ya desarrollados). En este sentido, suele ir a remolque, sobretodo en la primera época de oposición en la calle a la especulación, de las convocatorias, manifestaciones... que se plantean desde plataformas unitarias, organizaciones ecologistas o asociaciones de vecin@s afectad@s por tal o cual proyecto. Una flojera que, después de unos cuantos años monopolizado por plataformas ciudadanistas que muchas veces recogían los frutos de una crítica mucho más incisiva, se está empezando a superar dirigiendo nuestro rechazo (propaganda, convocatorias, etc.) a socializar el problema y buscar puntos de unión con otros afectad@s.

Mucho ruido y pocas nueces

“A medida que la mierda fue seguida por las inundaciones, la sequía, las materias tóxicas, la seguridad sísmica, la polución atmosférica y los residuos sólidos, en el Ayuntamiento comenzó a hacerse evidente que las guerras entre los propietarios y los promotores se estaban luchando de hecho en un campo de batalla de una infraestructura que se desmoronaba” (Ciudad de cuarzo. Arqueología de futuro en Los Angeles. Mike Davis)

Una vez hecho un breve repaso de estos grupos, nos gustaría indagar un poco más en la dinámica actual que caracteriza al grupo que más gente ha conseguido movilizar. Nos parece interesante por su calado a nivel social y las consecuencias que dicha dinámica tiene en el transcurso de las luchas contra proyectos del capital que interfieren en nuestro entorno y formas de vida.
En las primeras movilizaciones, estas plataformas, consiguieron un apoyo popular que dejaba entrever la gran fuerza con la que cuenta el movimiento contra la especulación para demostrar su rechazo y poner entre las cuerdas a polític@s y empresari@s. Un ambiente que ilusiona a cualquiera. De esta demostración de fuerza (grandes manifestaciones, caravanas para ser testigos directos de la destrucción del litoral...) se ha pasado a la repetición autómata, ultrafestiva y volcada en el merchandising puro y duro (tamboriladas, venta de camisetas, gorras, chapas, etc.) como formas de presión que, pasados unos cuantos años ya y testig@s atónit@s de la culminación de megaproyectos contra los que se protestaba, se han demostrado, cuanto menos, insuficientes e ineficaces. Se aferran a una forma de contestación que refleja la falta de convencimiento para acabar con esta vorágine y la poca imaginación para poner en práctica otras formas de presión que conlleve resultados reales. Es decir, hacer autocrítica, emprender otros caminos y no acomodarse a lo cuantitativo, y estético, de estas luchas. En algunos puntos de la península (por ejemplo Murcia) ni siquiera se han llegado a utilizar (a gran escala) métodos muy básicos de presión, y al alcance de todos, llevados a cabo de forma satisfactoria por vecin@s o trabajadores/as en otras ciudades y pueblos, como pueden ser el tapiado de inmobiliarias, el bloqueo del paso a maquinas excavadoras, el agobio a polític@s y empresari@s, la ocupación de terrenos o casas, la paralización de obras, etc.
Por otro lado, y colaborando conscientemente con el anquilosamiento, podemos decir que los partidos llamados progresistas han engatusado a buena parte de estas organizaciones, con las consecuencias que conlleva, desviando el rechazo hacía otros derroteros menos incómodos. De un tiempo a esta parte vemos estancada dicha dinámica en un punto muerto de denuncias y recogida de firmas que no permite caminar más allá de lo que no sea dejar, como única alternativa, todo el apoyo social conseguido en manos de partidos políticos y abogad@s. Los cuales recurren, año tras año, a órganos institucionales controlados por los mismos que, a su vez, planifican el mercado inmobiliario y apoyan un sistema injusto para la clase trabajadora en general.

Si a este panorama, le sumamos la obsesión que tienen algunas organizaciones con presentar a la maquina urbanizadora como un monstruo intocable, algo difuso y al que no se le puede identificar, nos topamos con la realidad: Un movimiento que, en ocasiones y en algunos lugares, está limitado por su propia estrechez de miras.

Cuando una plataforma, por ejemplo, ha conseguido movilizar, en torno a una idea muy clara de rechazo, a gran parte de la sociedad que se siente afectada directamente, no puede encasillarse en métodos que a la larga no han conseguido, ni siquiera, cambiar el rumbo de algunos acontecimientos. Desde ese momento pasan a ser cómplices del inmovilismo y convierten en un folclore rutinario lo que en un principio era una demostración de fuerza contra algo. No consigue tan siquiera rozar los intereses de los magnates del cemento. Caminamos, sin pena ni gloria, ante los símbolos de la devastación como si de una visita guiada, a nuestro futuro más inminente, se tratase.
Por nuestra parte, no podemos pasar por alto el hecho de que esto haya ocurrido y siga ocurriendo mientras continúan aprobándose proyectos e iniciándose las obras de otros muchos, con la sensación de que se puede avanzar más rotundamente en nuestras convicciones. Tampoco podemos engañarnos a nosotro@s mism@s y achacarlo a la falta de información, porque estamos saturad@s de ella. Por lo menos, en lo que se refiere a la especulación inmobiliaria (jornadas, panfletos, videos, carteles, datos...). En este punto asumimos también, los que nos movemos, algunas veces, en los márgenes como si no pasara nada, nuestra poca capacidad de reacción y propuestas claras ante los cauces institucionales que han ido adquiriendo estas protestas. Procedimientos a los que se han sabido adaptar, incluso reciclar perfectamente a su favor, la clase política y empresarial.
Por eso mismo, dejamos caer una serie de propuestas, para quien quiera recogerlas, con las que dotar a la lucha contra la especulación de otras formas de presión e interpretaciones, como las que hemos ido presentando desde que comenzó este proyecto de boletín, que consigan dar una bocanada de aire fresco a la, en nuestra opinión, paralizada oposición al ladrillo.

-Bloquear por todos los medios posibles y a través de la acción directa de los propios afectad@s, sin intermediarios de ningún tipo, los proyectos que están a punto de iniciarse en el terreno o aprobarse legalmente.

-Mantener un acoso constante, tanto físico como de propaganda visible en la calle, sobre los culpables directos de la destrucción de nuestro entorno (tiendas inmobiliarias, constructoras, personajes políticos, empresari@s...). Señalar claramente, sin casamientos partidistas, el juego “legal” que los políticos hacen a los empresarios para culminar sus negocios redondos.

-Relacionar dentro todas estas iniciativas no sólo el daño ecológico que se está produciendo sino también las consecuencias laborales (subcontratación, precariedad...) y sociales (expulsión de población de renta baja...) que existen detrás de cada movimiento del capital.


¡Es hora de mover ficha!
¡Quién dijo que no se podía vivir disfrutando de nuestro entorno sin chupasangres ni especulador@s!


El sistema funciona...
Entre enero y junio de este año han muerto en el estado español 580 personas a causa de accidentes laborales


La aprobación de la nueva reforma laboral, que abarata nuestros despidos como forma de presión y flexibiliza las condiciones de contrato a favor de la empresa, junto al incumplimiento sistemático y normalizado de horarios laborales, llegando a currar nueve o diez horas al día con contratos que regulan jornadas de ocho, está haciendo mella en sectores como la construcción. Estos últimos meses se han hecho notar las consecuencias directas de la explotación asalariada sobre la población:

Finales de mayo: Un obrero resulta herido en un edificio en construcción de la calle Sagasta (Murcia) tras caerle encima una chimenea.

Mediados de julio:
-Muere un trabajador tras recibir una descarga eléctrica en la localidad de Blanca (Murcia) mientras realizaba las instalaciones para la empresa Prieto Papel.
-Otro trabajador muere tras caerle encima un bloque de piedra en una cantera situada entre Fortuna y Abanilla (Murcia) mientras trabajaba en la línea de corte de mineral de la empresa Aridos Starmi.
-En El Algar (Cartagena) otro trabajador muere tras volcar el camión con el que descargaba material en una escombrera y en el que quedó atrapado.

Principios de agosto: Durante la demolición de una nave industrial en el barrio de Los Dolores (Cartagena) varias vigas dejan sepultado a un albañil de veintitrés años que muere en el acto. El otro trabajador, que manejaba la excavadora, consiguió salvar la vida al encontrarse dentro de la cabina.


HUB: una mentira flotante
¡AUTORIDADES PORTUARIAS DE CARTAGENA INTENTA VENDERNOS
OTRA MIERDA GIGANTE Y QUE FLOTA!


“ (...) La Autoridad Portuaria quiere aprovechar la buena ubicación de Cartagena para captar el creciente tráfico marítimo que atraviesa el Mediterráneo y multiplicar por cien el tráfico de contenedores con la construcción de la dársena de El Gorguel.” “El puerto regional, por el que ahora apenas pasan 20.000 contenedores anualmente, lleva camino, por tanto, de convertirse en uno de los más importantes del Sur de Europa”(...) “El proceso mundial de deslocalización industrial potenciará todavía más la alternativa marítima”(...) “la explanada que está previsto crear en El Gorguel alcanza los 1,2 millones de metros cuadrados de extensión.” “aunque la obra suponga el costosísimo levantamiento de una gran dársena sobre el mar y la apertura de un túnel de casi un kilómetro de longitud para comunicar el nuevo muelle con tierra adentro, por debajo de las montañas”(...). Total nada (Declaraciones recogidas de diversas fuentes, eso si, todas fiables).

Ya vuelven a ensuciarnos las orejas hablándonos de nuevas necesidades, de inagotables ventajas, de aumentos e incrementos, de lo obsoleto de las instalaciones actuales y de la ostia en verso. Concluyen el discurso para parias con una retahíla de datos y cifras sobre el cambio del modelo económico, la deslocalización industrial global, la necesidades del mercado y la competitividad surgida a raíz de éstas, y lo hacen desde un punto de vista desde el que diríase que ellos no son el Mercado, que ellos no han creado ni fomentado esta competitividad cuando la realidad es justo la contraria. Y todo esto para colarnos otro gol.
Con la excusa de la “deslocalización mundial de la industria” (que no es otra cosa que una parábola muy rimbombante para decirnos que el capital emprende una huida hacia delante llevándose los bolsillos llenos de dinero y, de paso, la producción, hacia países en vías de desarrollo donde el proletariado está en unas condiciones idóneas para su mejor explotación) pretenden que traguemos con la imperiosa necesidad de un puerto HUB, esto es, en palabras del ejecutable profesor de Economía de la Universidad de Cartagena, Antonio García Sánchez:

“los HUB son puertos en los que la mercancía se trasborda: se reciben grandes buques que estiban dejando en tierra una gran cantidad de contenedores que luego otras naves más pequeñas, llamadas feeder, se encargan de transportar a los puertos de proximidad y viceversa: allí se recogen las cargas de varios barcos de líneas más cortas para completar uno mayor que siga una ruta transoceánica”.

Una maravilla, vamos. Esto es, en definitiva, una infraestructura que responde a las necesidades del capitalismo actual, que se desplaza hacia las zonas previamente empobrecidas y que deja a los países de origen convertidos en almacenes, pasillos para la mercancía y escaparates para un turismo de alto poder adquisitivo, pasto para el sector ocio y servicios. Hablan de la necesidad de ampliación del actual puerto de mercancías en base a un incremento de la economía que va ligado a un mayor consumo y tráfico de éstas, pero, en el día a día real, lo único que al proletario le incrementa son las hipotecas, el precio del suelo y la vivienda, el coste de la vida, el precio de la gasolina, el precio de las verduras y el coste adicional de la madre que los parió. Con este panorama no se nos hace difícil imaginarnos qué cuentas corrientes serán las que incrementen económicamente con este proyecto que, como otros anteriormente, ya empiezan a vendernos como la repera.

1000 millones de euros en inversiones para servir a sus dueños, 1´2 millones de metros cuadrados destruidos y hormigonados, con túneles, dragas y lo que rondaré morena, que estos por destruir que no quede, la promesa de unas obras que traerán puestos de trabajo con fecha de caducidad, que al igual que ocurrió con la ampliación de la dársena de Escombreras, son pan para hoy y hambre para mañana, una economía de almacén y obrer@s industriales sirviendo cafés a los turistas listos para desplumar … Este será el legado de un proyecto que por su propia concepción solo puede servir para enriquecer a quien lo proyecta, lo aprueba, lo diseña, lo financia … nunca a una clase trabajadora que será la que lo sufra, con el aumento de la precarización de su subsistencia.

Desde los propi@s vecin@s de El Gorguel y diversas agrupaciones ya se están dejando ver señales de rechazo a este proyecto. Para quien quiera seguirlo, aquí dejamos las direcciones de Internet para estar al tanto y, a los vecin@s y afectad@s, mostrar desde estas humildes páginas nuestro apoyo, nuestra oposición a esta nueva mierda flotante. Estamos aquí para lo que queráis.

¡HAY QUE PARAR EL PUERTO HUBEXPULSEMOS A LOS CAPITALISTAS Y SUS PROYECTOS DE EXPANSIÓN! ¡Nuestra vida no es su patio de recreo!

Mas información: Asociación de Vecinos del Gorguel www.elgorguelestavivo.com



CHC no paga a sus trabajadores

Más de 30 trabajadores/as protestaron el pasado 16 de agosto frente a la sede situada en el Pol. Ind. La Estrella en Molina de Segura (Murcia)

Todo apunta a que la empresa murciana Conducciones Hidráulicas y Carreteras se encuentra en quiebra y l@s directiv@s, que dieron el cambiazo hace tres meses por otros rostros, se lo han llevado calentito. La empresa no ha pagado las últimas nominas a buena parte de sus trabajadores directos ni a l@s que tiene a través de empresas subcontratadas en obras de dentro y fuera de la Región (Almería, Valencia...)
Aparte del impago de nóminas también se han producido varios despidos improcedentes (sin el plazo de aviso y sin cobrar los finiquitos correspondientes). La mayoría de estos despidos, sin explicación ninguna, se produjeron hace un mes en una obra de construcción de pisos situada en Granada donde CHC tenía contratadas a 24 trabajadores/as. La mayoría de las deudas de CHC (300.000 € por ahora), que tiene iniciadas grandes obras públicas y privadas por toda la península, afectan directamente a las empresas que mantiene subcontratadas. Todas ellas por impago a los obrer@s y jefes de obra.


Deslocalizar la miseria
Apuntes rapidillos sobre la deslocalización de empresas
y sus consecuencias para l@s trabajadores/as


“El fenómeno de las deslocalizaciones tuvo más incidencia entre el 2000 y el 2005, años en los que casi medio centenar de empresas nacionales y extranjeras cerraron sus plantas en España para instalarlas en otros países, lo que destruyó cerca de 25.000 empleos” (Periódico La Verdad, 6 de agosto de 2007)

Empezaríamos por la definición aséptica:
Se llama deslocalización al proceso por el que algunas empresas, generalmente multinacionales, trasladan sus centros de trabajo y/o sus capitales en países desarrollados a países con menores costes para ellos, generalmente del Tercer Mundo. La deslocalización es una consecuencia natural de la libertad de movimiento de mercancías y capitales y es uno más de los problemas que acarrea la globalización de la economía que se traduce en una expansión contra todo a nivel mundial. Esta puede presentarse básicamente de dos formas:
Internalizada: La producción está en manos de una empresa filial de otro país; se trata de una "deslocalización intraempresarial" que también se denomina cautiva. Así, pues, se crearían filiales de la empresa propia en el extranjero.
Externalizada: La producción se subcontrata a otra empresa extranjera; se denomina "deslocalización subcontratada". Es decir, se trata de la subcontratación de un servicio a otra empresa o proveedor.
Los efectos inmediatos de una deslocalización se resumen en dos situaciones: Que las empresas cierren completamente sus plantas productivas en el país originario (y más desarrollado) o que las reduzcan a un nivel meramente representativo. En ambos casos el problema social más visible es el desempleo generado en el país de origen por el cierre de planta o reducción de la mano de obra. Pero es tan solo el más notable. Examinando las principales causas de la deslocalización podremos hacer un listado más completo; hemos resumido en tres las causas por las que una empresa puede tomar la decisión de trasladar sus plantas a otro país, rechazando de la lista la falta de rentabilidad en el país de origen, al entender que una empresa que tiene capital para poder afrontar un traslado con despidos incluidos no se halla precisamente en bancarrota, así pues las causas de este proceso son la búsqueda de mayores beneficios en función de:
-Menor coste de la mano de obra; legislaciones menos estrictas con la protección del medio ambiente y la lucha contra la contaminación, inutilización de tierras, etc.; condiciones de trabajo más flexibles, que permitan menos seguridad en el trabajo, mayor jornada laboral, etc.
A estas causas, Blanca Sánchez Robles, socióloga de la universidad de Cantabria, añade las de estabilidad política en el país de origen y de destino y una menor carga impositiva (menos impuestos, vamos), estas últimas podrían no perjudicar a nadie en un momento dado, pero tras examinar las anteriores, las conclusiones sobre sus efectos son claras:
-Aumento del paro en el país de origen; creación de empleo de baja calidad en el país de destino; contaminación y destrucción del medio ambiente, al carecer el país de destino de controles ambientales o de sensibilidad para evaluar los daños apropiadamente, lo que puede causar sequías, desertización, etc; "efecto dominó" en la competencia: para poder competir con la empresa deslocalizada, su competencia debe imitar sus métodos y reducción de la calidad del producto final, al ser realizado por personal en peores condiciones laborales, a lo que hay que sumar la peor calidad de materiales que ya se practica con el fin de ahorrar en costes.

La economía de tiranía

“Delphi protagoniza la última huida de una multinacional, con 1.549 despidos” (Periódico La Verdad, 6 de Agosto de 2007)
Cuando la producción no esta destinada a cubrir unas necesidades reales y concretas de la población (productora y consumidora al mismo tiempo) sino a sacar de ella el máximo beneficio posible con la intención de acumular y poder reproducirse, no hay que extrañarse de que sus efectos negativos puedan llegar a repercutir en la propia población (Productores y consumidores). La honda expansiva que deviene de la espiral: máximo beneficio-mayor producción-máximo beneficio, necesita cada vez de más mercados, más consumidores, menos costes y más terrenos que dilapidar. Esta expansión continua y contra toda naturaleza es una característica (y no un defecto como se tiende a pensar) del sistema de producción capitalista que, cuando se ha visto empujado a una crisis, que venia de la limitación por las fronteras, no ha dudado en variar su estrategia y conquistar todos los aspectos de la vida y todos los rincones de la geografía.
Las mercancías son el resultado de una separación de los productores de sus productos, que observa su mayor distancia con el fenómeno de la deslocalización, donde toda la producción se traslada a países donde su consumo será muy limitado y solo regresa al país de origen del capital para ser consumida y, en peor de los casos, para ser almacenada hasta llegar a su país de destino-consumo. La deshumanización del proceso productivo, que otorga a los beneficios económicos obtenidos de la mercancía mayor importancia que a las condiciones de vida de los productores-consumidores, es la consecuencia de la tiranía de la economía capitalista, que siempre actuará en contra de la mayoría y muy especialmente en contra de los consumidores-productores, de los proletari@s. Baja calidad de la producción, paro en el país de origen y explotación en el país de destino, desiertos industriales que se rellenan de chalets para consumidores con alto poder adquisitivo que son tratados como receptores de sus productos, como cerdos para el engorde, en el país de origen y degradación de zonas naturales, destrucción del medio ambiente en el de destino. La economía de tiranía no entiende de la vida.
Para acercar el caso, y sólo de pasada esta vez, mencionaremos el fuerte proceso de deslocalización que se esta llevando a cabo en todo el tejido productivo e industrial de la zona de Alicante, donde el pasado 25 de Julio, de un plumazo y en tan solo dos semanas, se limpiaron a 60 personas de cadenas de montaje y producción de la empresa siderometalúrgica JOFEL. Con el visto bueno del sindicato CC.OO, que tan sólo convocó una asamblea para informar a los currantes/as de lo bien hechas que tenía las cuentas la empresa y lo rotundamente invariable que se presentaba el proceso de cierre, actuando así de colchón a las decisiones de sus amos. Nos queda la duda de si movieron el rabo a priori o a posteriori. Los trabajadores/as que quedan, en la sección de textil, tienen sus días contados hasta diciembre de este año. Después de esta fecha las instalaciones quedarán relegadas a funciones de almacenaje.

Editado en Murcia y fotocopiable

Para mandarnos noticias, pedir algún número anterior o ponerse en contacto, escribir a: elpercal2007@hotmail.com





lunes, 25 de junio de 2007

El Percal


Boletín informativo desde la calle

Murcia, mayo de 2007


De nuevo por aquí...


Tras un letargo natural, de idas, venidas y replanteamientos, varias personas tenemos la idea de volver a editar El Percal (publicación local a nivel de Murcia), retomar un trabajo que nos parece interesante de cara a fomentar la conciencia crítica y como referencia a la hora de trasladar situaciones al resto de la población de la cual formamos parte (conflictos en torno a la especulación urbanística, la inmigración, el trabajo asalariado...). Hacerlas visibles desde una postura alejada de la archiconocida manipulación mediática. Por eso os hacemos saber que:

1. Tanto la línea editorial, las noticias, el contenido... serán tratadas de igual manera que en la anterior etapa, desde nuestra visión como clase explotada pero, no obstante, utilizando en las formas un lenguaje aséptico, claro y de calle que no implique lastres ideológicos en lo que se refiere al proyecto en si. En este punto, insistimos, ni partidos, ni sindicatos. Así, intentaremos escribir como hablamos sin olvidar un trasfondo crítico que pone todo su peso en resolver los conflictos y consecuencias del sistema capitalista de raíz.

2. En esta nueva etapa el boletín no tendrá una periodicidad fija como anteriormente, que era mensual, sino que se adaptará subjetivamente al “ritmo que marquen los acontecimientos” y a cuando tengamos algo que decir...

3. También queremos abrir este boletín, y la difusión que pueda tener, a otras realidades del Sureste peninsular (Almería, Alicante, Granada...) que nos ayude ha configurar lo que ocurre en una parte muy concreta del Estado (siempre conscientes de nuestras limitaciones). Unificar nuestras posiciones, dar a conocer actividades, promover convocatorias, plasmar situaciones que nos son comunes socialmente hablando, etc. Artículos sobre condiciones laborales, conflictos sociales, destrucción de nuestro entorno... que os toquen de cerca de una u otra forma.En definitiva, que aceptamos colaboraciones de todo tipo, con su correspondiente debate si es necesario hacerlo.


Un saludo desde la ciudad del cemento, el golf y los coches de lujo...




Si votar cambiara algo sería ilegal


Hoy en día resulta imposible hablar de l@s polític@s sin mencionar todo el aparato empresarial y financiero que tienen encima y no atentar a la coherencia y a la verdad. Son las grandes empresas, multinacionales, bancos, etc. los que toman las grandes decisiones al dictado de sus intereses, dejando escaso margen de maniobra a las cabezas visibles (o que nos muestran): l@s polític@s.El resto de la población somos l@s que sufrimos todo este entramado de decisiones y leyes. Con actitudes y formas de pensar inyectados por los medios de comunicación, consiguen que lleguemos a identificarnos con la clase política y empresarial cuyos intereses son radicalmente opuestos a los nuestros. Tomar conciencia de esto es también tomar conciencia de explotad@s. Y es que explotad@s somos tod@s l@s que nos vendemos por un salario (o l@ que estudiamos para mañana trabajar), porque tod@s tenemos el camino marcado desde que nacemos (educación-trabajo), porque a tod@s se nos escapa la vida de las manos entre bancos, horarios y rutina.


No han sido pocos, ni mucho menos inútiles, los medios que ha utilizado la clase parasitaria para que olvidemos la conciencia de clase (asalariada). Pero si hay algo que tenemos que tener claro es que el conflicto existe, y se materializa cotidianamente. Nosotr@s somos l@s que construimos las casas, l@ que barremos las calles, l@s que trabajamos en sus fábricas y oficinas... Nosotros somos, en definitiva, l@s que producimos. Pero no producimos para satisfacer nuestras necesidades, sino que producimos para otras personas que se van enriqueciendo gracias a nuestro trabajo. Unas personas a las que después compramos lo que nosotros mismos hemos producido. En vez de hacer de tod@s los medios de producción y repartir las actividades básicas (que sería lo lógico), seguimos inmers@s en esta espiral de producción y consumo que está destruyendo el planeta y que nos está destruyendo a nosotr@ también. No es de extrañar entonces que, a nivel global, el dinero y los recursos se acumulen cada vez en menos manos. Manos a las que no sólo enriquecemos, sino a las que delegamos, directa o indirectamente, nuestras vidas. A nadie extraña ya que una sola persona acumule más recursos que millones de personas que se mueren de hambre, lo cual no sólo lo permiten “nuestros solidarios gobiernos”, sino que es inherente al sistema capitalista.


No es necesario explicar a estas alturas a quién protegen las leyes y como está estructurado para que nadie cambie.En el momento en el que votamos nos situamos, automáticamente, en el otro extremo de la cuerda, tirando, queramos o no, hacia el lado opuesto: hacia su lado. Por eso no podemos seguir delegando nuestras responsabilidades y esperando soluciones. Soluciones que difícilmente van a llegar de l@s que son causa de nuestros problemas. No necesitamos representantes ni jerifaltes. No nos engañan. No les vamos a legitimar votándoles, ni siquiera a la llamada izquierda que lo único que hace es sacar brillo a nuestras cadenas. Queremos incidir en la sociedad sin intermediari@s, queremos decidir. Y para ello es imprescindible dejar de mendigar a l@s que nos están robando y comenzar a tomar lo que es nuestro. Mirémonos a nosotr@s: tenemos la fuerza, tenemos el cambio pero, como sucede con todos los aspectos de la vida, los límites nos los ponemos nosotr@ mismos. Las cosas no van a cambiar sin l@s que estamos implicad@s en ellas.Por eso no basta con votar, la solución es la abstención activa: tenemos y debemos ampliar al conjunto de la sociedad unas formas de organización horizontales e igualitarias que se basen en la solidaridad.

Contra la complejidad social y la sociedad de masas que crean en las personas impotencia y hacen que lo veamos todo imposible de cambiar. Y recuerda: sin ti nada va a cambiar.


Nuestros sueños no caben en sus urnas,

por la recuperación de nuestras vidas, por la agitación social




Muere un chaval en un Centro de Menores de Elche (Alicante)


El pasado martes 8 de mayo apareció muerto un chaval de 12 años

a causa de un ataque de asfixia, según las fuentes oficiales


El centro pertenece a la Fundación Internacional O´Belen y ya ha sido denunciado varias veces por maltrato y los métodos “terapéuticos” que utiliza para sobrellevar situaciones complicadas entre los chavales encerrados. En un primer momento se habló de suicidio o de una pelea como causa de la muerte, para terminar diciendo, según fuentes oficiales de la Consejería de Bienestar Social de la Comunidad Valenciana, que se trataba de una “muerte natural por asfixia”.


En estos centros de menores (Reformatorios) se realizan toda clase de torturas, tanto psicológicas como físicas, contra los chavales que, por desamparo o marginación social, acaban con sus huesos allí. Estos se encuentran custodiados en manos de fundaciones como O´Belen que sacan negocio de la situación de impotencia de estos menores.Algunos de los procedimientos que utilizan estas fundaciones para mantener a los chavales a raya son: realizar ejercicio físico hasta el agotamiento; medicarles obligatoriamente y de manera convulsiva; intervienen la correspondencia personal; pasando a los métodos más duros, como cuartos de aislamiento (llamado por los educadores “separación de grupo” ) sin luz, ni comida, ni agua, ni servicio y donde pueden llegar a permanecer hasta 24 horas; registros con desnudos integrales, etc.La mejor forma de acabar con un “problema“ es aislarlo.


La delincuencia, la inadaptación, la marginación, la exclusión son consecuencia muchas veces, sino todas, de los márgenes que provoca la sociedad de producción y consumo donde nos movemos.


Más información sobre centros de menores:


www.nodo50.org/desdedentro/ y centrosychicox@hotmail.com




Conflicto y desesperación en ZINSA (Cartagena)


“DIEZ OBREROS DE ZINSA SE ENCIERRAN CINCO HORAS

EN LA SEDE DEL CANDIDATO DEL PSOE Los trabajadores,

que rompieron un cristal y vaciaron un extintor,

fuerzan una reunión con la ministra Trujillo para aclarar el futuro de su fábrica”


Sin querer dármelas de vidente, el futuro ya se lo aclaro yo; ruina. Y veo la ruina por dejadez.En un impresionante giro con derrape se ha pasado de exigir un futuro para los trabajadores a mendigarle mas terreno para la empresa al estado.


La misma empresa que en su día les vendió al mejor postor. En este caso el mejor postor fue Quorum Capital, grupo empresarial en el cual delinque Miguel Durán, cacique local que amaso su fortuna explotando marroquíes con el tomate y que ahora reaparece como empresario inmobiliario, economista y salvapatrias, y aparece dándonos lecciones sobre especulación negándose a retrasar la fecha de traslado de la fabrica en base al interés especulativo de los anteriores propietarios de Zinsa, interés este que no se le escapa a nadie, pero del que no debería de venir a moralizarnos uno de sus mayores promotores.


¿Y los sindicatos? El secretario general de Comisiones Obreras en la Región de Murcia, Jose Luis Romero, hace de la tragedia un circo y sale a la palestra vestido de payaso para decirnos que: “Zinsa tiene menos futuro que las maracas de Machin” Y qué “Solo nos queda dirigirnos al Papa” (declaraciones aparecidas el pasado mes de Abril en el periódico La Verdad ). Desde luego, con bastardos de este calibre de por medio no tenemos mucho futuro.Hay 270 familias que dependen de una solución a corto plazo, y esta no saldrá nunca del juego de intrigas palaciegas y acusaciones cruzadas en que políticos y empresarios, todos culpables, están convirtiéndola. Ni del capitulo de renuncias y vergüenzas en que los sindicatos están transformando su presencia en el conflicto.


Solo la acción directa de los obreros, solo la lucha de los currantes de Zinsa por su futuro, por su trabajo, sin entrar a jugar con las reglas de la empresa, la consciencia de su fuerza unida al apoyo de su pueblo, una Cartagena que observa en su letargo como se cometen estas barbaridades que antes nunca permitieron y que debe despertar (decir basta a una basura que juega con la vida de la gente y el porvenir de un pueblo) salvará esta situación que parece perdida.


¡Proletarios de ZINSA en lucha, ni una renuncia más!

Es nuestro futuro lo que está en juego


El tranvía de las elecciones


“Los murcianos podrán elegir el modelo de las marquesinas (para el tranvía) a partir del 11 de diciembre”,”Los primeros en montar en el tranvía en su trayecto de prueba serán los periodistas de La Verdad”,”El estreno del tranvía levanta expectación entre miles de vecinos”... (Titulares de la prensa local preparando el terreno para las elecciones)


La mejor manera de tapar la cantidad de insuficiencias que existen en una ciudad como Murcia (y pedanías), y de paso revalorizar zonas muy concretas donde el negocio inmobiliario avanza irremediablemente, es presentar la más eficaz propaganda electoral en forma de tranvía. El cual no lleva, literalmente, a ninguna parte. Porque, por unos meses, cumple con su única misión: convencernos a tod@s, mientras hacemos el trayecto, de la imagen de prosperidad, abundancia y modernidad que representa.


Por otro lado nos encontramos con el contraste puro y duro en otros lugares: la ausencia casi total de autobuses de línea regulares a los polígonos industriales donde todos los días se desplazan gran cantidad de currelas, la dejadez voluntaria en barrios enteros en pleno centro que se caen a pedazos como el Castillejo, San Andrés donde malviven familias enteras o se hacinan cientos de inmigrantes...


Nuestros gobernantes saben bien como renovar su desgastada imagen para mantener el chiringuito y seguir viviendo a costa de los grandes negocios empresariales que “harán progresar a la ciudad”.


¡A los políticos, ni voz, ni voto!



Contacto: elpercal2007@hotmail.com